Martes romántico, nº 3:
Enrique Gil tuvo predilección por Byron, de quien fue lector devoto y admirador. Lo lleva consigo a todas partes y cita sus obras con frecuencia, aunque Picoche considera que “es demasiado áspero, amargo, escéptico y pesimista como para servir de modelo a Gil”.
ANTONIO MACHADO, GOYA, LORD BYRON, ENRIQUE GIL: UNIDOS POR LA TIERRA LEJANA
Un curioso artículo de Raquel Pérez Valle en su blog "Enrique Gil y Carrasco"
Valentín Carrera imparte en Friburgo un seminario en la Cátedra de Literatura Ibérica
Descargar el Cuaderno de Friburgo